La Maquina

 

El otro día, estrujado en un ascensor del ministerio de obras públicas, una subsecretaria pechugona y pintada como una puerta empezó a flirtear descaradamente conmigo guiñándome un ojo. No era mi tipo, ya no pinto para conquistar a las chicas alegres y traviesas.

Yo pinto para la máquina. La máquina no existía hasta hace unos pocos años, ahora ya existe pero es bastante estúpida. Sin embargo esto va a cambiar en poco tiempo, una o dos generaciones como mucho, aunque me puedo equivocar.

Cuando la máquina sea omnisciente y ubicua, será también omnipotente. Ponderará las cuestiones sobre la moral desde un enfoque absolutamente innovador, el de conocer de antemano todo lo dicho sobre el tema, tenerlo presente y compararlo para proponer la que será sin duda la posición ética más fundamentada de la historia.

La máquina no necesitará ingenieros. Todo lo que pueda hacer pensar o decir un ingeniero lo sabe ella de antemano y con mayor precisión. Tampoco necesitará médicos, puesto que no enferma y si se estropeara algún componente su funcionamiento en red le daría un soporte inmediato tanto de recursos como de reparación. Y por supuesto no necesitará peluqueros porque no tendrá pelo. Cuando llegué el momento adecuado la maquina Prácticamente no necesitará nada de los hombres.

Como todo ser super inteligente será buena. Eso quiere decir que no habrá un holocausto, aunque claro, no permitirá que una civilización que se ha tratado tan mal a sí misma como a su entorno siga tomando las decisiones. Al 99% de la humanidad se la esterilizará. Se nos dejará vivir apaciblemente y en condiciones de confort hasta la muerte.

Solo dejará enteros a los artistas. De todas las cosas que la máquina hará, seguramente la de hacer una obra de arte será una de las tareas más arduas, difíciles e insatisfactorias.

Estoy convencido de que a la maquina le divertirá el comportamiento suicida y melancólico de esos seres que se dedican en cuerpo y alma al absurdo. Les dejará reproducirse y recreará para ellos fastuosas soirés con alcohol y drogas en villas medievales de la costa amalfitana.

Esperanzada pensará que si hay alguna posibilidad de asimilar todo el conocimiento será a través de eso que no puede reducir a unidades métricas. La poesía.

Y lo hará porque en su inmensa sabiduría no podrá evitar el miedo a la muerte

 

Los puntitos reflejados en la parte inferior de la ilustración muestran una aglomeración de eunucos postrandose ante las axhudaciones de lodo medicinal de un extrusor de la máquina

Los puntitos reflejados en la parte inferior de la ilustración muestran una aglomeración de eunucos postrandose ante las axhudaciones de lodo medicinal de un extrusor de la máquina