Los miércoles crítica

Los miércoles voy al campo. Hay unos críticos degenerados que se reúnen en unos prados jugosísimos llenos de margaritas y pagan a jóvenes para que aguanten sin comer ni beber hasta lipotimia. Supongo que son descendientes de Calígula.

A mí eso me toca mucho los cojones. Soy de la severísima escuela española de artistas. Nos remontamos a los Merovingios, cultivamos la narrativa falsa y somos ultra técnicos. Me dan ganas de hacerles tragar su metalenguaje de mierda y sus maneras de burdel de Jarvard.

Estos mamones han dejado de crear e instigan a los flojeras para que hagan un arte institucional, neoacadémico.

Cuando voy al campo los miércoles no siempre les encuentro. Saben que merodeo por allí iracundo y se muestran huidizos. Pero hay veces que no lo consiguen y me lío a pedradas con ellos mientras les grito.

-Un hallazgo teórico no es sinónimo de arte. El estructuralismo es solo un modelo vetusto y refutado, cualquier intento de modelizar la estética es en vano, aunque lo vuestro pasa de castaño oscuro, ni vosotros os creéis lo que decís, venís aquí como el que viene a ver el bombero torero, empujados por un morbo primario y burdo. Os voy a dar hasta en el cielo de la boca. Más os valdría iros a hacer puñetas en vez de hacer tantas gilipolleces. Cabronazos.

Ellos a su vez me gritan a mí:

-¿Por qué no vas a tocarte los cojones a tu casa? Qué te importará a ti si esta chica barra modelo se avino a darse de alta en el régimen de autónomos por obra y servicio, la cual nos estás jodiendo por cierto, para hacerse desmallar en nuestra presencia y deleite. A ver si te vas a creer todavía las mierdas esas del romanticismo del genio contra el mundo. Tú eres más vulgar que las lentejas gilipollas y como sigas tirando piedras voy a ir allí y te voy a mandar a Burgos de un tortazo. Maricón.

-Por mucho que pronostiquéis el fin de la lírica ésta no se va a esfumar. La lírica es inmarcesible como la inmortal de Andersen y a vosotros lo que os jode es no tener ni el talento mínimo para hacer la o con un canuto, de ahí vuestros circunloquios estériles de jerguilla incompresible hasta para vosotros. La diarrea tautológica es tan ridícula como prescindible.

-El materialismo es un rodillo, ríndete a la evidencia, la lírica no es más que una ficción, la poesía no existe. La técnica está superada por la proyección profesional, el laif estail y el sex apil. Que yo sepa aun no tienes un chalet en “El Viso”, ni por este camino que llevas lo tendrás. Te vendría bien leer menos poesía y más autoayuda, pesao.

Esto nos puede llevar media hora larga pero al rato me aburro y me voy con cargo de conciencia por pisar esa hierba tan fresca y robarle algo de sol al paisaje que debería ser su único usufructuario.

La crítica si no mata tonifica.

 

El crítico ante el final de la lírica

El crítico contemplando el final de la lírica